martes, 15 de marzo de 2011

Las dos mentes

El cerebro tiene dos partes: una que prueba y otra que comprueba...para muestra analicen la siguiente historia:

Imagínese usted un pueblo muy pequeño donde hay una señora vieja que tiene dos hijos, uno de 19 y una hija de 14.

Está sirviéndoles el desayuno y tiene una expresión de preocupación. Los hijos le preguntan qué le pasa y ella les responde:

“No sé, pero he amanecido con el presentimiento de que algo muy grave va a sucederle a este pueblo”.

El hijo se va a jugar al billar, y en el momento en que va a tirar una carambola sencillísima, el otro jugador le dice:

“Te apuesto un peso a que no la haces”. Todos se ríen. El se ríe.

Tira la carambola y no la hace. Paga su peso y todos le preguntan qué pasó, si era una carambola sencilla. Y él contesta:

“Es cierto, pero me he quedado preocupado de una cosa que me dijo mi madre esta mañana sobre algo grave que va a suceder a este pueblo”.

Todos se ríen de él, y el que se ha ganado su peso regresa a su casa, donde está con su mama, feliz con su peso y le dice:

Le gané este peso a Dámaso en la forma más sencilla porque es un tonto.

¿Y por qué es un tonto?,

Porque no pudo hacer una carambola sencillísima según él preocupado con la idea de que su mamá amaneció hoy con la idea de que algo muy grave va a suceder en este pueblo.

Y su madre le dice:

No te burles de los presentimientos de los viejos porque a veces salen.

Una pariente que estaba oyendo esto y va a comprar carne. Ella le dice al carnicero:

“Deme un kilo de carne”, y en el momento que la está cortando, le dice:

Mejor córteme dos, porque andan diciendo que algo grave va a pasar y lo mejor es estar preparado”.

El carnicero despacha su carne y cuando llega otra señora a comprar un kilo de carne, le dice:

“Mejor lleve dos porque hasta aquí llega la gente diciendo que algo muy grave va a pasar, y se están preparando y comprando cosas”.

Entonces la vieja responde:

“Tengo varios hijos, mejor deme cuatro kilos…”

Se lleva los cuatro kilos, y para no hacer largo el cuento, diré que el carnicero en media hora agota la carne, mata a otra vaca, se vende toda y se va esparciendo el rumor.

Llega el momento en que todo el mundo en el pueblo, está esperando que pase algo. Se paralizan las actividades y de pronto a las dos de la tarde.

Alguien dice:

¿Se ha dado cuenta del calor que está haciendo?

¡Pero si en este pueblo siempre ha hecho calor!

Sin embargo -dice uno-, a esta hora nunca ha hecho tanto calor.

Pero a las dos de la tarde es cuando hace más calor.

Sí, pero no tanto calor como hoy.

Al pueblo todos alerta, y a la plaza desierta, baja de pronto un pajarito y se corre la voz:

“Hay un pajarito en la plaza”. Y viene todo el mundo espantado a ver el pajarito.

Pero señores, dice uno, siempre ha habido pajaritos que bajan aquí.

Sí, pero nunca a esta hora.

Llega un momento de tal tensión para los habitantes del pueblo, que todos están desesperados por irse y no tienen el valor de hacerlo.

Yo sí soy muy macho -grita uno-.

Yo me voy.

Agarra sus muebles, sus hijos, sus animales, los mete en una carreta y atraviesa la calle central donde todo el pueblo lo ve.

Hasta que todos dicen:

“Si este se atreve, pues nosotros también nos vamos”.

Y empiezan a desmantelar literalmente el pueblo. Se llevan las cosas, los animales, todo.

Y uno de los últimos que abandona el pueblo, dice:

“Que no venga la desgracia a caer sobre lo que queda de nuestra casa”, y entonces la incendia y otros incendian también sus casas.

Huyen en un tremendo y verdadero pánico, como en un éxodo de guerra, y en medio de ellos va la señora que tuvo el presagio, le dice a su hijo que está a su lado:

¿Vistes m’hijo, que algo muy grave iba a suceder en este pueblo?


Todo lo que creamos en nuestra mente tiende a hacerse realidad, adecuamos las circunstancias para poder verlo y comprobar lo que habiamos previsto.

jueves, 10 de marzo de 2011

Tenacidad

Cuantas veces hemos escuchado frases como estas: "Nunca volvere a fumar", "No tomare una copa mas en mi vida", "Mañana si me levanto temprano". Con frecuencia confundimos deseos con decisiones, el deseo es intencion, la decision implica accion, solamente actuando e insistiendo convertimos nuestros sueños en realidades.
Los lideres que trascienden les caracteriza la tenacidad, se empeñan a tal grado en lograr sus sueños que facilmente se ven cristalizados, saben que cada dia se plantea sus propios retos, su objetivo inmediato es conquistar y obtener la victoria de ese dia, el "solo por hoy" es su grito de combate, estan conscientes que los cimientos del futuro se edifican en el presente. El mundo pertenece no a los mas dotados o inteligentes sino a los mas tenaces, que no dejan de insistir hasta lograr lo que desean. Asi cada uno de nosotros tenemos que insistir permanentemente con nosotros mismos y nuestros seguidores para crear habitos de excelencia, solamente a traves de la repetitividad se logran crear costumbres nuevas y mejores. De nada o poco nos sirven los dones naturales si no estamos dispuestos a esforzarnos para desarrollarlos. Cuando logremos llegar a la cima debera surgir inmediatamente el siguiente reto: mantenerse en ella; y solo aquellos que resisten los fracasos, como quienes saben digerir los exitos sin envanecerse, permanecen. Es como escribir en la nieve, sabemos que se borrara y mañana tendremos nuevamente que escribir, y asi constantemente. No es facil, pero le aseguro que vale la pena.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Proactividad

Se trata de un termino que no se encuentra en la mayoria de los diccionarios. No significa solo tomar la iniciativa. Significa que, como seres humanos, somos responsablesde nuestras propias vidas. Nuestra conducta es una funcion de nuestras decisiones, no de nuestras condiciones. Podemos subordinar los sentimientos a los valores. Tenemos la iniciativa y la responsabilidad de hacer que las cosas sucedan.
Examinemos la palabra "responsabilidad", en la cual encontramos alusiones a las palabras responder y habilidad: Habilidad para elegir la respuesta correcta. Las personas muy proactivas reconocen esa responsabilidad. No dicen que su conducta es la consecuencia, el condicionamiento o las circunstancias. Su conducta es un producto de su propia eleccion consciente; se basa en valores, y no es producto de las condiciones ni esta fundada en el sentimiento. Las personas proactivas llevan consigo su propio clima. El hecho de que llueva o brille el sol no supone ninguna diferencia para ellas. Su fuerza impulsiva reside en los valores y si su valor es haver un trabajo de buena calidad, no depende de que haga buen tiempo o no.
Las personas proactivas se mueven por valores: valores cuidadosmente meditados, seleccionados e internalizados.

lunes, 7 de marzo de 2011

ENEMIGOS DESTRUIDOS

Se cuenta que cierto emperador chino, cuando le avisaron que en una de las provincias de su imperio había una insurrección, dijo a los ministros de su gobierno y a los jefes militares que lo rodeaban: “ Vamos. Seguidme. Pronto destruiré a mis enemigos.” Cuando el emperador y sus tropas llegaron a donde estaban los rebeldes, él trató afablemente a éstos, quienes, por gratitud, se sometieron a él de nuevo. Todos los que formaban el séquito del emperador pensaron que él ordenaría la inmediata ejecución de todos aquellos que se habían sublevado contra él; pero se sorprendieron en gran manera al ver que el emperador trataba humanitariamente y hasta con cariño a quienes habían sido rebeldes. Entonces el primer ministro preguntó con enojo al emperador: “¿De esta manera cumple vuestra Excelencia su promesa? Dijisteis que veníamos a destruir a vuestros enemigos. Los habéis perdonado a todos, y a muchos hasta con cariño los habéis tratado.
Entonces el emperador, con actitud generosa, dijo: “Os prometí destruir a mis enemigos; y todos vosotros veis que ya nadie es enemigo mío: a todos los he hecho mis amigos.”